Es inevitable. En estas fechas nos invaden hordas de barbudos hombrecillos rojos con predilección por el agujero de las chimeneas. Entonces, ¿estamos a salvo si no tenemos chimenea? No; estos astutos irruptores saben trepar.

Siguiendo con el mismo tema, pero abordándolo desde una diferente perspectiva: Como los/as más observadores/as habréis podido comprobar, ha cambiado ligeramente el aspecto del blog. ¿A qué se debe? A que se ha apoderado de mí el espíritu de la Navidad, por supuesto...

Bueno, vale, lo cierto es que ayer me aburría. Pero seguro que debe de haber alguien que se guíe por la decoración de los sitios para saber en qué época vive; y así le ayudo un poco.

Si a alguien le molesta, daña u horroriza algo de la actual decoración que me lo diga, que las críticas aquí siempre son bien recibidas. Asimismo, si queréis contribuir aportando cualquier cosa, podéis hacerlo.

Sin más que decir, os dejo con una alegre cancioncilla para crear ambiente: