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Querido Dios
Me encantan esas pequeñitas cosas que me recuerdan que el mundo no tiene por qué ser siempre un lugar hostil. Y es curioso que casi siempre sea la inocencia de un niño lo que me lo recuerde.
Lo que muestro hoy aquí son cartas de niños dirigidas a Dios, exista o no. Espero que consiga sacarte una sonrisa, como hizo conmigo. Haz clic en cada una para verla ampliada (y, tranquilo/a, yo traduzco):
martes, octubre 21, 2008
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Etiquetas:
cómo somos...,
en pocas palabras,
gente
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2 comentarios:
la verdad siempre esta en las cosas simples. Me gustaron mucho estas cartas para Dios. ¿Su servicio de correo será más rapido que el nuestro? Considerando que él es Dios, de seguro que sabe de antes, lo que me vamos a escribir....
Un abrazo desde Chile.
simplemente genial es cierto k la inocencia de los niños al menos para mi ya la he olvidado, ya no puedo llegar a un estado de inocencia tan puro komo el de akellos niños k escribieron eso ..... me has dado muxo en k pensar... gracias
koki_dish
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